jueves, 28 de julio de 2011

MEJOR ME CALLO

No tengo nada que decir y sin embargo, mi mente no se calla por las noches. Estoy cansada de su incesante plática incoherente, 'brincona', sin razón y sin respuestas. Sólo esta cháchara que me desvela y que, que cuando al fin logro dormir me desmañana con sus torpes comentarios de un sin fin de cosas que no tienen solución. Sus temas son de esos que no tienen sentido en las horas de la noche, lista de pendientes que sólo se pueden atender en horas hábiles, o de asuntos que nunca tendrán hora, ya que mi mente igual que hace la lista del supermercado, planea el robo de algo inexistente, invita a proyectos que no me interesan y se cuestiona incansable sobre decisiones que no quiero abordar.

El otro día, es decir la otra noche, no podía dormir porque a mi mente se le ocurrió escribir un libro ¡hazme el favor, como si fuera enchílame otra! pero de esas sutilezas ella no entiende y yo ¡sí yo!, intentando dormir y ella dale que dale escribiendo.

Eso sí, no sé que tengan las horas de la noche, que te lo juro, en ellas mi mente escribe como premio Nobel y dice palabras que no uso, con tanto tino, que no sé porqué no me levanto por un lápiz, será porque tal vez esos escritos no toleren el día o sean como fantasmas que con la luz y la vigilia se esfumen.

El libro que escribió esa noche mi mente, era autobiográfico, pero estoy segura que se inventó una personalidad o era la mente “bis” de un universo alterno, ya que no tenía nada que ver con la que yo conozco. Imagínate era aventurera, decidida, fresca, triunfadora, estaba enamorada y no temía a nadie ni a nada ¡es de risa!, porque no se le parece, pero yo la dejaba hablar.

¿Te dije que no tengo nada que decir? Si, sí te lo dije y aunque quisiera detenerla eso es imposible, cuando se pone en ese plan, no me escucha y confieso que además me atrapó la trama de su inexistente vida.

Aquí un poco de lo que recuerdo que mi mente escribió aquella noche:

... mexicana, del DF. y no me siento orgullosa, ¿por qué que crees que traigo lentillas de color y me tiño el pelo de dorado? Yo debí nacer en otro lado, por lo menos en otra familia, una familia “nice”, la verdad que esto de ser mujer, mexicana y pobre no es como para ponerse a aplaudir, llevas todas las de perder y ni como ayudarte, por eso decidí largarme bien lejos, mínimo Las Vegas, y de ahí pa’arriba. Cogí el mundo y lo puse a girar, cerré los ojos y dije, “en donde caiga el dedo, ahí me voy” y que cae en África, ¡ah no! para nada. Entonces me di otra oportunidad, porque tarada no soy. ¡Va de nuevo!... Vueltas, vueltas, el dedo que señale para dónde, ¡Londres! ahora si me gustó... no creas que el dedo cayó exacto, pero casi, que no es lo mismo pero es igual.

¿Cuánto cuesta un boleto a Europa? Ni idea. Al día siguiente fui a hipotecar mi depa, me dieron una nada pero con eso la libraba. Busqué una agencia de viajes y en menos de una semana estaba en Londres; en el avión conocí a un libanés que se portó lindísimo conmigo y me ofreció su casa en lo que yo encontraba donde hospedarme, ¿qué puedo perder? me dije. Y acepté. En la segunda semana ya estaba enamorada de Londres y de Saúl. Conseguí trabajo en una taberna por las noches, por las tardes de mesera en un café italiano que quedaba a diez cuadras de donde vivía. A las tres semanas me movía perfectamente a pie, en camión o en metro, me sentía muy orgullosa; en un mes tenía trabajo, casa y mantenía a mi hombre. Cómo me gustaría que mis amigas me vieran, era yo totalmente europea...”


...te lo dije, esto no aguanta la luz del día, está fatal, no lo vuelo a hacer, mejor que mi mente siga hablando y yo... ¡que pena! Mejor me callo, porque no tengo nada que decir.


María Elena Gómez Velázquez

13 de Enero del 2004



2 comentarios:

  1. Hola wapetona.Menos mal que no tienes nada que decir.Tienes mucho que decir,que pensar y sobre todo que escribir y mostrar a los demas.
    Y como dijo ese tal Skay Walker, ya sabes el de la guerra de las galaxias:que la magia de la noche siga envolviendo tus pensamientos y te acompañe en la soledad del silencio nocturno. Jajajaja.Un muak muy fuerte mi arma.

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  2. María Elena, meno mas que no te has callado, porque mira de lo que nos hubiésemos perdido. Intrigante y a la vez verosímil, de buen ritmo y con mucho sentido.

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